Desarrollo de un modelo de madurez para la gestión de la movilidad en los sistemas de Smart Cities

RESUMEN

 

Las áreas urbanas crecen a una gran velocidad. Más de la mitad de la población mundial vive ya en ciudades. La tendencia es incluso más acusada en España donde solo el 20% reside aún en zonas rurales. La avalancha humana hacia las urbes parece irreversible. La previsión que maneja Naciones Unidas señala que el 70% de los seres humanos habitarán en centros urbanos en 2050. Este organismo advierte de que el aumento de la población de las ciudades puede convertirse en un auténtico problema, a no ser que se logre mantener la armonía entre los aspectos espacial, social y ambiental de las localidades, así como entre sus habitantes.

Bajo este escenario también se contrasta que la combinación del progreso económico con el rápido crecimiento de la población produce un alto consumo de recursos que se manifiesta en el agotamiento de los mismos. Es por esto que a medida que aumenta la urbanización los problemas también aumentan como:

· Contaminación en el aire
· Calentamiento global
· Congestión del trafico
· Transporte público desbordado
· Escasez de agua y energía

En definitiva, los gobiernos deben hacer frente a todos estos problemas y aceptar los desafíos que está provocando la nueva y creciente urbanización y los nuevos estilos de vida, diseñando cambios en los actuales modelos de las ciudades que se anticipen y mitiguen los efectos de este crecimiento urbano. Es en este nuevo escenario es donde cobra fuerza el concepto de ciudad inteligente que son aquellas ciudades que aplican soluciones innovadoras en áreas como la movilidad, el medio ambiente, las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), el urbanismo, el consumo energético, la economía del conocimiento y la gobernanza, para garantizar un desarrollo económico y urbano sostenible en un entorno que ofrezca buena calidad de vida para sus ciudadanos. En este estudio nos centraremos en las ciudades inteligentes en el área de la movilidad y transporte la cual ha adquirido importancia debido al aumento de tráfico en los núcleos urbanos, la congestión urbana, la contaminación y un transporte público insuficiente lo que hace ver la necesidad de un modelo de que permita fortalecer y mejorar los procesos.

Un modelo de madurez para la planificación y gestión de la movilidad y transporte ayudaría a definir, entender y medir los procesos y su eficacia en las ciudades.

Para ello se llevaron a cabo dos estudios: uno comparativo de los Modelos de Madurez existentes actualmente, y otro estudio de campo mediante juicio de expertos (encuestas), a través del cual se obtuvo una visión actual del conocimiento que hay sobre las ciudades inteligentes y sus áreas.